- Fiscala de Alajuela explicó que el mes de marzo registró un incremento en delitos contra la propiedad, incluido el robo de automotores.
Daniel Quesada A.
01 de junio del 2020. La temporada de emergencia por el COVID-19, en la que muchas personas evitan circular y permanecen en casa, no ha detenido el fenómeno del robo y hurto de vehículos; así lo reveló Lilliana Solórzano Artavia, fiscala de Alajuela, durante el programa del Ministerio Público, FrecuenciaMP.
En el espacio, transmitido este lunes en Radio Columbia, a través de 98.7 FM, la especialista indicó que, durante el primer trimestre del 2020, se registró un incremento del 2,8 por ciento en los delitos contra la propiedad, cometidos en el cantón central de Alajuela, según un estudio del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que comparó la estadística con el mismo período del año anterior.
La sustracción de vehículos es una variable determinante en estos datos, pues, la fiscala afirmó que los criminales han encontrado condiciones propicias para cometer los delitos, principalmente con el método denominado policialmente como del descuido, el cual ocurre cuando la persona deja el carro en vía pública o en algún lugar sin seguridad y, además, sin dispositivos que alerten o eviten que se apoderen de este.
Solórzano agregó que la mayoría de estos hechos ocurre en días y horas determinadas, pues son más frecuentes “los lunes, y las franjas horarias principales son, en horas de la mañana, entre las 9:00 a.m. y 11:59 a.m. y, en horas de la tarde, de 6:00 p.m. a las 9:00 p.m.”.
Criminalidad organizada. Durante su participación en FrecuenciaMP, la fiscala destacó que se ha “detectado y desarticulado grupos organizados dedicados a la sustracción de vehículos, sin embargo, el fenómeno no se detiene fácilmente, puesto que las estructuras se recomponen y se agrupan en nuevas organizaciones”.
Asimismo, apuntó que también saben de personas que actúan de forma independiente y otras que responden a solicitudes de grupos delictivos, los cuales les solicitan apoderarse de carros específicos y entregárselos, a cambio de alguna retribución.
Una vez que son sustraídos, los automóviles y motocicletas suelen ser vendidos en partes o para repuestos, “otros los obtienen para “gemelear”, que consiste en alterar su aspecto y sus números de registro y ponerlos en circulación con otras características, o bien para sacarlos del país”.
Denuncia. Lilliana Solórzano hizo un llamado a denunciar este tipo de delitos, pues, asegura, existen muchos casos en los que se logra recuperar el vehículo; aunado a ello “al denunciar, la persona está abonando información relevante para el análisis de incidencia delincuencial, lo que permite enfocar acciones de control o de vigilancia en zonas detectadas con alta presencia de delitos y saber, por ejemplo, qué metodología se está utilizando”, subrayó.
Durante el pasado mes de marzo, el OIJ registró un total de 33 denuncias por robo o hurto de vehículos, solo en el cantón central de Alajuela; estas se investigan con dirección funcional del Ministerio Público.
Usted puede repasar el programa en el sitio web de la institución, siguiendo este enlace: https://bit.ly/2Ap7Grv