Daniel Quesada A.
01 de febrero del 2021. La Unidad Especializada de la Fiscalía General consiguió que el Tribunal Penal de Hacienda y de la Función Pública condenara a Wray Esquivel Quesada a nueve años de prisión e inhabilitación para el ejercicio de cargos públicos por el mismo período, luego de demostrar su culpabilidad por tres delitos de concusión y uno de enriquecimiento ilícito.
La sentencia, dada a conocer esta tarde, se relaciona con hechos ocurridos entre el 2017 y el 2018, cuando la imputada trabajaba como jefa de despacho en la oficina de su hermano, el exdiputado de los mismos apellidos, quien fungió como legislador por el partido Renovación Costarricense en el período 2014-2018.
Durante el juicio, la representación fiscal consiguió acreditar que la acusada formó parte de un plan mediante el cual se cobró parte de su salario a tres funcionarios del despacho; el excongresista y su esposa de apellidos Cortés Oporto, también habrían participado en ello, por lo que enfrentarán un juicio aparte.
En el caso de dos de los colaboradores, este cobro irregular se habría dado bajo la justificación de que compensaría una disminución en el salario de Cortés, quien fue trasladada a un puesto de menor remuneración; mientras que al tercero de los ofendidos se le indicó que se trataría de una contribución al despacho.
La Unidad Especializada demostró que el total del beneficio ilegítimo obtenido a partir de estas acciones ascendió a ¢10.746.310.
Mientras la sentencia queda en firme, Wray Esquivel Quesada deberá cumplir las medidas cautelares de impedimento de salida del país, firmar una vez al mes y entregar el pasaporte; todo dentro de la causa que se tramitó en el expediente 18-000085-0033-PE.